Juan Cánovas del Castillo (Los olvidados)



LOS OLVIDADOS

Lo recuerdo como si fuese ayer, cuando todos saltábamos y gritábamos de alegría.

No parábamos de celebrarlo, y todos estábamos especialmente ansiosos por regresar a nuestro hogar y contárselo a todos nuestros familiares, amigos, conocidos... estábamos orgullosos de la gran labor que habíamos realizado, y por eso no nos importaba a quien contárselo.

Habíamos luchado y trabajado lo más duro posible para ganar y ya teníamos nuestro merecido. La gente nos elogiaba como héroes, porque héroes, guerreros, luchadores, era en lo que nos habíamos convertido.

Nada más llegar a casa mi familia me recibió con los brazos abiertos y con una gran familia para celebrar mi regreso a este hermoso hogar.

Había sobrevivido junto a mis inolvidables compañeros el duro invierno ruso y la dureza que supone combatir en una guerra tan larga y sobre todo en un país con temperaturas tan extremas como a las que se llegaba en aquel gélido país.

Pero ya había regresado y tocaba volver a la rutina diaria y dejar atrás a los compañeros perdidos los días luchando por sobrevivir...

Por aquellos tiempos la gente nos recordaba como héroes cuando salíamos a la calle, pero hoy en día pocos son los que recuerdan esta hazaña. Es una pena que hoy en día no se recuerde a todos aquellos que marcharon a defender su bandera y patria.

El último deseo que tengo es que se me recuerde, y no solamente a mí, sino a todos los que lucharon por España y por ayudar a Alemania.

Juan Cánovas del Castillo Morilla. 4ºESO F.

Comentarios